A ti, que con tu simple compañía (créeme) eres bálsamo curativo de muchas de mis penas.
A ti, que consigues doblegarme en las cosas sencillas, y hacerme medio-enfadar con manías tontas.
A ti, que podrías escribir libros sobre estereotipos que harían sangrar ojos y oídos de no poca gente.
A ti, que aciertas siempre en los cincuenta puntos de la diana de la realidad, la que se esconde tras frases que son susurros y medias mentiras que son verdades completas.
A ti, que te mereces treinta mil veces más de lo que recibes y sin embargo esperas, existes, con tu sonrisa simpática y tu acento olvidado a ratos.
A ti, que te pareces a tantos pero que en realidad no te pareces a nada que haya conocido, una curiosa dualidad que cuanto más te conozco más me sorprende.
A ti, que me hiciste llorar cuando te fuiste y me haces llorar cuando me tocas la fibra.
Te quiero mucho tío.
4 comentarios:
increible... i cert!
muuuuas
bellas palabras...
abrazos
Te debo un comentario y opinión...disculpa la tardanza...
Pero antes te comento este para decirte que por un momento sentí envidia de aquel a quien van dirigidas estas palabras porque están cargadas de un amor (querer así es amar) y las leo y me abofetean su sinceridad
Lo dicho, te debo un comentario
Y qué suerte que se lo puedas dedicar
Felicidades a los dos
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