23.5.06

Hoppípolla

Y como toda pausa de las mías, la falta de premeditación y la coincidencia entre el sentir y el expresarlo vuelven a ser habituales.

Vuelvo a mirar a lo lejos, evitando el mirar cerca, y Sigur Rós siguen siendo el instrumento (mi instrumento) para dejar fluir los dedos y escribir metáforas de un yo perdido.

¿Sabes que pensaba? Que seguirías escondido donde yo no pudiera verte, impertérrito ante el fluir de sentimientos por la sangre y las arterias. Esperando, al acecho, a que un resbalón de paraguas rotos te trajera un nuevo encuadre para esa foto que siempre andas buscando.

Y de tan equivocado que estaba al abrir las manos se me escaparon arañas grises.

Ahora que vuelves a estar conmigo no te dejaré ir sin aprovecharme de tu melancolía. Serás mi acompañante y mi abrigo. Serás mi saco roto de las ideas estériles. Serás el hueco donde guardar las agujas muertas que nunca tuvo mi reloj de arena.

Y así hasta el día en que vuelva a oir esa voz en directo, y de nuevo pueda volver a llorarle a las nubes que traen lluvia, y pueda dejarme ir, y volar alto, y creer que el mundo soy yo y lo que me rodea son ecos que me completan, para luego caer, morir, y renacer.

Sigo diciendo que hablas de esperanza.

"Við sjáumst tvö                                                "We see eachother
Í sjálfum mér" In myself"