10.3.09

conmigo

Cuando me detengo por un momento en lo que quiera que esté haciendo. Cuando me muevo en esos paréntesis que son los desplazamientos entre rutinas adquiridas. Cuando hago una pausa entre el decir y el repetir. Cuando miro al espejo por la mañana, con las legañas puestas y los ojos desorientados. Cuando el único sonido que me acompaña es el clac-clac de las teclas al (d)escribirme.

Cuando los párpados se me cierran de tan cansado, pero mi mente se agita y murmulla. Cuando me duelen la espalda y las decisiones lentas. Cuando llamo al ascensor y lo acaban de cerrar en otro piso y aun tarda unos segundos en ponerse en marcha y llevarme a donde sea. Cuando las puertas y los suelos crujen y solo quedo yo en pie para oirlo.

Es entonces cuando estoy conmigo.

Y a ratos, no me gusta.

3 comentarios:

Gabriela dijo...

Y aunque a veces no te guste, no negarás que eres una compañía muy fiel...

Y desde lejos puede llegarte también...
Un abrazo mientras despiertas, desperezas o lo que sea...

corazondemimbre dijo...

¿Sabes? Es bueno dedicarse tiempo a uno mismo, conocerse, saberse, protegerse, cuidarse, exigirse, aceptarse...

Todo iba bien hasta que he leído la última frase y he visto que la has catalogado dentro de la categoría "triste" y me pregunto qué te pasa.

Yo también estoy en una época triste, de bloqueo, de no saber avanzar, de no entender cómo hacerlo.

Te mando un abrazo fuerte, y gracias por relagarnos nuevas palabras; nuevos sentimientos.

Deric dijo...

momentos para regalarse a uno mismo