No sabría como definirlo. Dejémoslo en esa especie de vértigo tenue que te sorprende cuando estás soñando que te asomas a una cornisa sin barandilla.
Da igual. De todas maneras es una angustia que no se pasa, que ahí queda, dejando un sabor agrio justo en el esófago. Y lo que te dice es: "eh, estoy aquí, y no me voy a ningún lado".
A veces me siento muy solo. Debe ser por la tormenta.
Cerrad al salir, que la nieve entra, y a diferencia de lo que pasaría fuera, aquí dentro cuajaría.
4 comentarios:
si. como tragarse un trozo de plomo y llevarlo atravesado en la garganta día y noche.
(cierro fuerte, pero me quedo dentro un rato y te enciendo una estufa antes de irme)
y kien querría salir, estando tu dentro, haga la temperatura ke haga.
perdona, x lo de anonimo
Mucha gente querria salir. yo el primero...
Gracias por tu post :)
Pero porqué anonimo?
anonimo, xq no me conoces ni tu a mi, ni yo a ti, xo me encanta como escribes (supongo ke te lo diran mucho). Bueno esta vez te dejo mi nombre.
Olga
Publicar un comentario