8.1.14

intocable.

Secuencias en blanco y negro. Figuras inertes y a la vez borrosas de tanto movimiento. Sentimientos que se plasman en una exquisita unión de fotogramas, y que dan lugar a una gran obra de arte. Las lágrimas que derramas son la rúbrica que indica que sí, que merecía la pena trasnochar un poco más y terminar de ver esta increíble película, y que sí, que siguen habiendo detalles en el mundo que indican que no todo está perdido.

Si no la habéis visto, ya estáis tardando.